Se termina un nuevo curso,
y aquí seguimos presentes,
sin importarnos un bledo
de lo que diga la gente.
Que si viejos, que si mayores,
que si qué van a aprender,
¡pero habrá cosa más triste
que un viejo sin saber leer?
Para poder distraerse
y para poder opinar,
y pa no ser una cosa
que se pueda arrinconar.
Que la cultura da fuerza,
y hasta ganas de vivir;
el momento lo demuestra,
¡por eso estamos aquí!
Los jóvenes y los mayores
todos juntos en la escuela,
los jóvenes con su alegría,
los viejos con su experiencia,
pa terminar con la incultura
en esta bendita tierra.
lunes, 2 de noviembre de 2009
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